El Hospital Clínico San Carlos de la Comunidad de Madrid ha organizado las II Jornadas lnternacionales de Cirugia Robótica, inauguradas por la Viceconsejero de Asistencia Sanitaria de la Clomunldad de Madrid, Ana Sánchez, que reúnen a más de 60 expertos en el manejo del robot Da Vinci
Los asistentes a este congreso tienen la oportunidad de presenciar una cistectomía o extirpación radical de vejiga, siendo la primera vez que los urólogos del Cllnlco realizan esta operación con esta tecnologia. Además, seguirán en directo o en dlferldo, varlas Intervenciones de patologías de cirugía general y aparato digestivo, ginecología y urología, todas ellas comentadas por expertos que detallan paso a paso cada una de las operaciones permitiendo la lnteractuaclón. Por otra parte, se contemplan varias varias mesas de dlscusión donde se plantea la aplicación de la cirugía robótica a otras especlalldades, así como las dificultades que plantea.
Las Jornadas son dirigidas por Jesús Alvárez Fernández-Represa, jefe del Servicio de Cirugía General y Aparato Digestlvo ly director del Plan de Cirugía Robótica del Hosplbal Clínico San Carlos. El programa diseñado para esta ocasión ha sldo coordinado por los doctores Elena Ortiz Oshiro, del Servlclo de Cirugía General y Aparato Digestivo y Jesús Moreno, de Urología, y Pluviu Coronado del Servicio de Glnecología.
Cuatro años de actividad con el Da Vinci
El Hospital Clínico San Carlos de la Comunidad de Madrid ha intervenido con el robot Da Vlnci a 585 pacientes desde el año 2006 en que incorporó esta tecnología a sus quirófanos, poniendo en marcha su Programa de Cirugia Robótica. Este avance se traduce en mayor preclslón, menos errores, menor cantidad de trauma para el paciente, con cicatrices más pequeñas, menos anestesia, menor sangrado y menos transfusiones de sangre, menos riesgo de Infección, menor tiempo de hospitalización y recuperación más rápida para el paciente, con menos dolor. La cirugía robótica se realiza sin que el cirujano esté en contacto directo con el enfermo. Este, situado en una consola de mando (colocada en el mismo quirófano, o eventualmente en otro lugar de la misma ciudad o Incluso en otro país), dotada de un visor en 3-D maneja unos mandos ergonómicos comparados en destreza a la mano humana, A través de éstos se transmiten las Instrucciones al robot, que está situado junto a la mesa de operaciones y que mediante dos brazos, reproduce con precisión los movimientos indicados por el cirujano y ejecuta la operación. Un tercer brazo sostiene una cámara endoscópica en 3-D.